domingo, 14 de marzo de 2010

Señor, haz de nosotros instrumentos de tu paz.

Donde haya odio, pongamos amor.

Donde haya ofensa, pongamos perdón.

Donde haya discordia, pongamos unión.

Donde haya error, pongamos verdad.

Donde haya duda, pongamos la fe.

Donde haya angustia, pongamos esperanza.

Donde haya tristeza, pongamos alegría.

¡Maestro!

Que no busquemos tanto ser consolados como consolar.

Ser comprendidos , como comprender.

Ser amados, como amar.

Porque dando se recibe;

Perdonando se es perdonado;

Y muriendo se resucita a la vida eterna.

San Francisco de Ásis