Recuerdo muchas cosas sobre Jesús de mis clases de religión, una de ellas era la de que cada mañana de clase empezaba con una oración, y esa oración la hacíamos cogiendo un texto de la biblia y analizarlo desde el punto de vista de los personajes que aparecían en él. A veces aparecía Jesús haciendo un milagro, otras contando un milagro, y en todos los análisis sobre la persona de Jesús siempre actuaba pensando en lo que podía hacer para que los demás estuviesen mejor y fuesen felices.
También recuerdo en este curso que hemos trabajo mucho las parábolas que Jesús utilizaba para que la gente entendiera mejor sus enseñanzas. También recuerdo las miradas de Jesús en los diferentes textos evangélicos. Siempre una mirada de amor, de perdón, nunca de rencor, y pensamientos malos. Quiere lo mejor para los demás.
Con esto he aprendido que Jesús fue un hombre que dio todo por el felicidad de los demás. Que Jesús que hay que hacer el bien a todo el mundo como nos gustarían que nos hiciesen a nosotros aunque sea a una persona que te cae mal.
